Escocia se convertirá en la primera nación del mundo en introducir un precio mínimo para las bebidas alcohólicas, después de que el Gobierno autonómico ganara hoy una demanda judicial interpuesta por la Asociación del Whisky Escocés (SWA, en inglés) en el Reino Unido.
El Tribunal Supremo británico, máxima instancia judicial del país, dictó por unanimidad que imponer un precio mínimo por unidad de alcohol, cifrado en 50 peniques (55 céntimos de euro), no vulnera la legislación comercial de la Unión Europea (UE) tal como había argumentado la SWA.
En contra de los alegatos de la asociación, los magistrados concluyeron que la imposición de un coste mínimo era una medida «más eficaz» para encarecer el alcohol más barato -y por ende combatir el alcoholismo- que subir los impuestos, puesto que en el segundo caso el vendedor tenía margen para rebajar el precio.
El tribunal afirmó que la medida «es una manera proporcional de conseguir un objetivo legítimo».
Este dictamen pone fin a un largo proceso judicial, que se inició en 2013, después de que el Parlamento escocés aprobara en 2012 una ley para fijar el precio mínimo del alcohol como medida de salud pública, y que pasó por el Tribunal de Justicia europeo.
Tras recibir la autorización de los jueces, el Gobierno de Edimburgo planea ahora introducir a principios de 2018 la nueva norma, que elevará el precio base de la unidad de alcohol de los aproximadamente 18 peniques (20 céntimos de euro) actuales a 50 peniques.
La asociación de lucha contra el alcoholismo Alcohol Focus Scotland calcula que la cantidad máxima de alcohol recomendada para el consumo semanal (14 unidades) puede comprarse por solamente 2,52 libras (2,80 euros) en Escocia, un territorio donde existe un grave problema de adicción.
La nueva normativa, que estará vigente seis años y expirará si el legislativo escocés no la renueva, aumentará el precio mínimo de una botella de vino tinto a unas 4,70 libras (5,2 euros), un paquete de cuatro latas de cerveza de medio litro costará al menos 4 libras (4,4 euros) y una botella de 70cl de whisky valdrá a partir de 14 libras (15,5 euros).
La ministra principal escocesa, la independentista Nicola Sturgeon, expresó hoy su «satisfacción» por la resolución judicial, al igual que lo hicieron la oposición conservadora y las autoridades sanitarias.
La portavoz de Sanidad del Ejecutivo escocés, ShonaRobison, dijo por su parte que se trata de «un dictamen judicial histórico» y «un punto de inflexión» en la ambición del Gobierno de «transformar la problemática relación que tiene Escocia con el alcohol».
«En un dictamen de relevancia global, el Tribunal Supremo del Reino Unido ha apoyado unánimemente nuestra pionera medida de precios del alcohol, que salvará vidas», afirmó.
El Gobierno británico y los autonómicos de Gales e Irlanda del Norte, así como el Ejecutivo de la República de Irlanda, evalúan medidas similares.